Puede ser difícil estar seguro de que un producto es respetuoso con el medio ambiente, ya que esto engloba un gran número de parámetros (cortocircuitos, ciclo de vida, huella de carbono, etc.).
Uno de estos parámetros esla ecotoxicidad: la toxicidad de nuestras fórmulas sobre los ecosistemas que pueblan el mundo natural que nos rodea. Se trata de un parámetro complejo, porque el riesgo que suponen nuestros productos para el medio ambiente es una relación entre el peligro que presentan y la exposición de los organismos a nuestros productos. Hasta la fecha, no existe ni un marco normativo ni un consenso reglamentario para evaluar este impacto.
Sin embargo, existen etiquetas y logotipos (que no son autodeclarativos) que pueden utilizarse para identificar los productos ecodiseñados.
La etiqueta ecológica europea tiene por objeto diseñar y promover productos (bienes y servicios) que respeten el medio ambiente y la salud humana a lo largo de su ciclo de vida (desde la extracción de las materias primas hasta su fabricación y uso). Fomenta la producción y el consumo sostenibles de productos, así como la prestación y el uso sostenibles de servicios.
eToxiSafe: Logotipo medioambiental que garantiza la calidad, respaldada por pruebas científicas fiables y pertinentes. Se trata de un enfoque científico que establece, mediante estudios ecotoxicológicos, que un producto tiene un impacto reducido en el medio ambiente.
En conclusión, ¡no existe el producto perfecto para la naturaleza!
Sin embargo, la protección solar es esencial para la piel, y la mejor alternativa para los consumidores es estar bien informados para poder consumir conscientemente.
¿Los puntos clave a la hora de elegir un producto de protección solar? Una formulación agradable que dé ganas de aplicar el producto varias veces al día para una protección óptima, envases reducidos y ecodiseñados, y una marca comprometida con el medio ambiente con una comunicación transparente que le ayude a elegir su producto con la conciencia tranquila.